El presente Plan Nacional se construye a partir de los resultados obtenidos en el proceso de diagnóstico llevado a cabo para identificar el estado de la integración de la Responsabilidad Social (RS) en el país, que tuvo lugar en 2018. En este proceso se tuvierno en cuenta a todos los grupos de interés relevantes a nivel nacional, así como las tres dimensiones de la sostenibilidad: social (en la que se integra la protección de los derechos humanos), ambiental y buen gobierno. El objetivo fue conocer el nivel de madurez del país en materia de RS para definir lineamientos futuros que permitan avanzar de manera sólida sobre los esfuerzos ya realizados, identificando las principales sinergias para maximizar el impacto.
Para completar dicho diagnóstico, tuvo lugar una primera fase de revisión de información pública disponible de la situación de Panamá con respecto a las iniciativas relacionadas con la RS y los derechos humanos a nivel internacional y nacional, y una segunda fase de diálogo presencial con los grupos de interés más relevantes a través de talleres y mesas de diálogo multistakeholder.
Antes de contar con la aprobación del texto final del Plan Nacional, tuvo lugar una consulta pública para validar las áreas de acción definidas, así como las iniciativas y medidas para su consecución. Durante 2019, se avanzó en la planificación de la futura implementación del Plan hasta que, a principios del año 2020, se iniciaba una situación sin precedentes: la pandemia provocada por la COVID-19.
En este contexto, se considera que el presente Plan Nacional puede servir de guía estratégica para el país, como hoja de ruta de recuperación, transformación y mejora de la resiliencia de Panamá frente a la crisis COVID-19.
Por eso, durante el año 2021 se celebraron cinco mesas de trabajo (una por cada una de las áreas de acción definidas en el Plan) para identificar nuevas necesidades, iniciativas o proyectos que permitan al país reforzar sus fortalezas para asegurar una recuperación rápida y eficiente de la crisis.